El domingo fuimos a desayunar a San Martin, tenia altas expectativas, en especial de los huevos benedictinos. Hace algun tiempo Pollo Campero dejó de servirlos y desde entonces buscaba un lugar donde volverlos a comer. Podria hacerlos en casa, ya que se como hacer una buena salsa holandesa, pero el domingo se hizo para descansar.
Ibamos K, A.S. y yo, K pidio un desayuno salvadoreño, que consistia en dos pupusas, una de queso y otra de chicharron, con dos huevos estrellados, salsa, curtido, cafe, leche, jugo de naranja y pan. Yo pedi una porcion de huevos benedictinos con loroco e incluye los mismos acompañamientos. A.S compartio los desayunos de nosotros.
Respecto al desayuno salvadoreño, las pupusas son un desastre, la de chicharron tenia un sabor y textura mas parecido a carne molida y la de queso, tenia muy poco queso. El curtido y la salsa muy pocos.
El desayuno de huevos benedictinos me gustó, aunque deberían llamarlo de otra forma, porque no utilizan salsa holandesa, sino mas bien una bechamel con loroco.
Servicio entre regular y bueno, el ambiente agradable, aunque nos sentamos en mesas exteriores y habia frio, aun asi era comodo. Los precios me parecieron casi aceptables. El desayuno salvadoreño costó Q54, incluyendo cafe, bastante pan (de buena calidad) y leche. Pero las pupusas no fueron de nuestro agrado.
Respecto al desayuno de benedictinos, nos cobraron Q42, para un desayuno dominical me parece razonable, y el sabor bueno. Aunque la salsa no es la original.
Senti un poco de tardanza en el servicio y algo de desorden. Lo recomendaria a medias.
Publicado 8/12/10
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